Bentley Bentayga Diesel 2017, el primero de gasóleo de la marca

Estaba claro que el Audi SQ7 TDI no estaría solo en el Olimpo de los diésel sobrealimentados por dos turbos y un compresor eléctrico. Antes o después otros vehículos montarían ese V8 TDI V8 de 4.0 litros con 435 CV de potencia a partir de 3.750 rpm y nada menos que 900 Nm de par, disponibles desde solamente 1.000 rpm. Y le ha tocado nada más y nada menos que a otro SUV, el Bentley Bentayga 2016.

No será nada barato. Un SQ7 arranca en los 110.959 euros y este Bentley Bentayga Diesel andará por casi el doble (por ahora solamente podemos comparar tarifas del Reino Unido y están en esa línea). Un precio elevadísimo para un TDI… que eso sí, es el diésel más rápido del mercado y con unos acabados interiores de esos que te dejan patidifuso.

Calca la aceleración de su primo de Inglostadt, ya que realiza el 0 a 100 km/h en 4,8 segundos, pero mientras el alemán ha limitado su velocidad punta a 250 km/h, el Bentley Bentayga diesel es capaz de alcanzar los 270 km/h si se acelera como si ni hubiera mañana. Nada mal para un SUV que marca en la báscula nada menos que 2.390 kilogramos.

Curiosamente, este motor V8 de alta tecnología pesa 3 kg más que el poderoso motor W12 biturbo de 6.0 litros. A efectos de comparación, recordamos que este refinado propulsor de gasolina rinde 600 CV partir de 5.000 rpm y tiene 900 Nm de par, como el diésel de ocho cilindros… pero un poco más tarde, a 1.350 rpm. Ni que decir tiene la Bentayga de gasolina sigue siendo considerablemente más rápido pues alcanza los 100 km/h en 4,1 segundos y 301 km/h de velocidad máxima.

¿La gran diferencia entre estos dos propulsores? Pues el consumo. Mientras que el sediento W12 homologa 13,1 l/100 km en el ciclo combinado (habría que ver cuánto gasta yendo a fondo), Bentley asegura que el V8 turbodiesel gasta sólo 7,9 l/100 km, una cifra impresionante si tenemos en cuenta su peso y que ofrece una autonomía de 1.000 km si se lleba el tanque de 85 litros.

El sistema eléctrico de 48 voltios no solamente es clave para que el compresor eléctrico funcione de manera adecuada también permite el uso de una suspensión electromecánica inteligente, que compensa de forma activa los balanceos en curva… y podría generar energía de los baches.

No hay apenas diferencias estéticas entre los modelos en función del combustible, más allá de una calandra de tonos oscuros, emblemas V8 Diesel en las aletas delanteras y tubos de escape un poco distintos. Las entregas a clientes están programadas para que comiencen el próximo año en Europa, con Australia, Rusia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y Taiwán algo más adelante. No hay noticias sobre un posible lanzamiento en EE.UU.