Audi A8 L Extended, porque el tamaño sí importa
Como es habitual en las berlinas de presentación, el Audi A8 cuenta con una versión de batalla alargada, el Audi A8 L que mide 5,27 metros de largo. No. Corto no es. Al menos para un 99,99% de la población. Ahora, para quienes quieren más (y lo pueden pagar) llega el Audi A8 L extended, una berlina de 6,36 metros de longitud, con seis puertas creada bajo pedido especial para un cliente. Más larga que un Mercedes-Maybach Clase S (de unos míseros 5,24 metros), y que hace parecer a un Serie 7 de batalla larga, con uss 5,24 metros, un coche compacto.
No ha sido fácil llevar a cabo el coche, que ha supuesto casi un año de desarrollo. Y es que el coche mantiene la misma rigidez y niveles de segurdad que la berlina, sin que la silueta se haya modificado demasiado. Su peso es alto, lógicamente, pero teniendo en cuenta su tamaño los 2.418 kilogramos que marca en la báscula no son una exageración. Lo han conseguido gracias al diseño Audi Space Frame y está fabricado casi enteramente de aluminio.
Obviamente, hay cambios estructurales en el Audi A8 L Extended. Se han ampliad los los largueros laterales y el túnel central, utilizando elementos de aluminio extruido. También hay refuerzos en el espacio que separa el maletero del habitáculo y en el techo hay tubos y traviesas de aluminio para conseguir, entre todas estas medidas, una rigidez torsional y flexión muy similares a un A8 L de serie.
El habitáculo es excepcional y, como hay un panel de cristal de 2,40 metros en el techo, aumenta la sensación de espacio (con cortinillas en cada fila de asientos). Los ocupantes de las dos filas traseras irán en unos butacones individuales tapizados de cuero Valcona, todos con ajustes eléctricos. En la fila posterior hay una consola central continua, pantallas para el sistema de entretenimiento y un receptáculo refrigerado.
El Audi A8 L Extended está movida por un motor 3.0 TFSI que desarrolla una potencia de 310 CV y entrega hasta 440 Nm de par, que permite a la berlina pasar de 0 a 100 km/h en 7,1 segundos, con una velocidad máxima de 250 km/h, limitada electrónicamente. El motor va asociado a una transmisión tiptronic de ocho marchas y cuenta con el sistema quattro de tracción permanente a las cuatro ruedas. Tras las llantas de 19 pulgadas con diseño de 15 brazos se encuentra un sistema de frenos idéntico al del Audi S8… algo impresindible para detener a este transatlántico rodante.
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