¡Ojo con el sistema de frenos!

l sistema de frenos es esencial para la seguridad del conductor y para la de todos los que comparten las vías. Un frenazo en seco, un frenado de emergencia, puede marcar la diferencia entre un susto y un accidente. Los conductores deberían, por seguridad, hacerle un mantenimiento adecuado y regular a los frenos de su carro.

Es posible detectar las señales que le envía su cacharrito cuando los frenos fallan. Vibraciones y chirridos son los síntomas más evidentes de un problema en el sistema de frenado. El buen conductor no espera a que los frenos le griten para llevarlo a una merecida inspección en el taller.

El conductor ideal, en cambio, sabe adelantarse a los problemas naturales del desgaste de la máquina realizando inspecciones cotidianas a su carro y, en particular, al sistema de frenado.

En primer lugar, evite frenar bruscamente. Detener el carro intempestivamente desgasta más
rápido las pastillas, discos, bandas, tambores y zapatas. Parece obvio, pero nunca sobra
recordarlo. Lo mejor es presionar el pedal de manera gradual y desacelerar bajando los cambios. El
célebre y bien reputado frenado de caja es siempre más recomendable que halar vigorosamente el
freno de mano como todo un Vin Diesel en Rápido y Furioso. La vida de su carro es
inversamente proporcional a la cantidad de pata que le meta bien sea al acelerador o al freno.

La próxima vez que se encuentre en una calle vacía, en vez de acelerar a fondo, procure hacerle un
test a sus frenos. Revise si están largos, si existe tambaleo al frenar o si se perciben vibraciones o
chillidos menores. Y al parquear, confirme que su freno de manos esté funcionando a la
perfección. No olvide revisar el líquido de frenos, otro de los hábitos propios del conductor
modelo. En caso de que haya alguna anomalía, es hora de visitar a un especialista.

En síntesis, los frenos son el principal sistema de seguridad del carro. Pueden salvarle la vida a

usted, a los pasajeros que se movilizan dentro de su carro, a aquellos que se encuentran dentro de
los otros vehículos, y a los ciclistas y peatones que también se movilizan en las calles.
Lo invito a que sea usted también un conductor ejemplar.