Saturday, January 14, 2017

El aceite de motor: La sangre de tu vehículo


Nuestros carros son potentes máquinas que requieren de algunos elementos para que funcionen correctamente y por más tiempo. Uno de estos componentes primordiales es el aceite para motor.
El aceite de motor cumple una doble función. Por una parte, forma una capa lubricante entre las piezas del motor y, por otra, ayuda a mantenerlo limpio, ya que nuestro grasoso aliado arrastra las impurezas que, de no ser así, se acumularían al interior del mecanismo.
La apropiada lubricación del motor previene que piezas tan importantes como los pistones, anillos, cilindros y un largo etcétera se friccionen. Este roce recalienta las piezas, desgastándolas y, en el peor de los casos, fundiéndolas. Es de vital importancia revisar el nivel de aceite del carro regularmente. Dicen los expertos que este simple chequeo visual debe realizarse como mínimo cada 3.000 kilómetros. Para realizar esta medición, se debe desenvainar la varillita que se encuentra en el motor, la que se parece mucho a un estoque de toreo. Se recomienda, a la hora de meterlo, limpiarlo con un paño y contar con una buena iluminación, un buen pulso y, en algunos casos, una pizca de paciencia.
Dos son las cosas a las que se le deben prestar atención a la hora de verificar el aceite que se encuentra en la punta de la bayoneta. La primera, claro está, es nivel, que está claramente demarcado por una rayita. La segunda, es el color del lubricante. Un lubricante oscuro, tirando a negro, es un lubricante que pide a gritos un cambio.
La vida del lubricante no es eterna, ya que este líquido, con el paso del tiempo y los kilómetros, se va degradando y quemando. En caso de que su vehículo utilice aceite mineral, derivado del petróleo, el cambio se debe realizar luego de 5.000 o 7.000 kilómetros. Por su parte, la vida útil de los lubricantes sintéticos puede alcanzar los 15.000. No olvide solicitar, en esa misma visita, que el filtro del aceite sea también reemplazado (apróx. cada 10.000 kilómetros).
Cuando se trata de aceites, hay que tomar en cuenta el viejo y célebre dicho: “lo barato sale caro”. Se recomienda no escatimar en gastos y comprar aceite de la mejor calidad, que prolonga la vida de los motores y sus piezas. El funcionamiento del aparato es muy exigente y un aceite de mala calidad puede resultar en un daño tan grave que hasta puede ser necesario sustituir todo el bloque del motor. ¡Y eso sí es realmente caro!
Es también preferible utilizar siempre el mismo producto. Mezclar distintos aceites puede alterar sus propiedades, puesto que los hay de distintas viscosidades. Si lo que se quiere es cambiar el tipo de aceite, es importante lavar internamente el motor.
En caso de que se encienda el testigo del tablero del carro que indica que hay un problema con el aceite, se recomienda apagar el motor y echar una ojeada al interior del capó. Si el nivel de lubricante está por debajo de lo indicado, es indispensable añadir lo que haga falta. La luz de alerta de aceite puede indicar también que hay un problema de presión del líquido. En ese caso, el problema puede estar en la bomba de aceite y es primordial hacer una escala en pits.
El aceite es primordial para el correcto funcionamiento del motor. Le recomendamos que le preste gran atención a ese ítem. Su motor y su bolsillo se lo agradecerán mil veces.

No comments:

Post a Comment