¿CUÁLES SON LOS COSTES DE MANTENIMIENTO DE TU COCHE?
Cuando llega el momento de comprar un coche, no solo debemos fijarnos en su precio de venta sino también en los costes asociados, como el de mantenimiento. De hecho, existen algunos modelos que, aunque pueden ser más caros, se amortizan debido a su elevada eficiencia y su bajo costo de mantenimiento.
También es necesario tener en cuenta que a partir del sexto año de vida la mayoría de los coches comienzan a necesitar revisiones cada vez más periódicas ya que es necesario realizar el mantenimiento preventivo y correctivo, así como sustituir algunos de sus componentes debido al desgaste.
¿Cuánto cuesta el mantenimiento de los coches?
Un exhaustivo estudio llevado a cabo por Audatex nos revela cuál es el coche más interesante según su costo de mantenimiento. Para obtener los datos se computó un período de 8 años o 120.000 kilómetros recorridos.
Los resultados indicaron que el mantenimiento de un coche de gasolina es un 56% más caro que el de un coche eléctrico. No obstante, el mantenimiento de un coche híbrido es un 52% más económico que el de un modelo diésel. Aunque en el caso de los coches de alta gama, el mantenimiento de los coches diésel es un 29% más caro que el de sus equivalentes híbridos.
Los resultados indicaron que el mantenimiento de un coche de gasolina es un 56% más caro que el de un coche eléctrico. No obstante, el mantenimiento de un coche híbrido es un 52% más económico que el de un modelo diésel. Aunque en el caso de los coches de alta gama, el mantenimiento de los coches diésel es un 29% más caro que el de sus equivalentes híbridos.
Esta gran diferencia de precio se debe, fundamentalmente, a que los motores eléctricos son mucho más sencillos y no es necesario cambiar la correa de distribución o sustituir los filtros y el aceite al llegar a determinados kilómetros. De hecho, un coche eléctrico necesitará una pequeña revisión cada unas 5.000 horas pero durante ese mismo lapso de tiempo un vehículo a combustión habrá recorrido un promedio de 50.000 kilómetros, lo cual significa que se deben haber realizado al menos dos cambios del filtro de aceite.
Por otra parte, los sistemas híbridos son más económicos de mantener que los motores tradicionales ya que prescinden de elementos que se deben reemplazar por el uso, como el embrague, el alternador y la correa de distribución. Por si fuera poco, el sistema de frenos regenerativo también ayuda a que se produzca un desgaste menor en las pastillas y los discos de freno.
Por tanto, considerando una media de 15.000 kilómetros anuales, durante ocho años, el mantenimiento de un coche diésel cuesta una media de 4.602 o 5.420, en dependencia del modelo. El mantenimiento de esos mismos modelos a gasolina cuesta entre 4.294 y 3.982 euros mientras que el mantenimiento de un coche híbrido suma apenas unos 2.509 o 2.586 euros.
Los neumáticos también suman a la ecuación
Cuando se hace referencia al mantenimiento de un coche, no podemos olvidar el costo de los neumáticos. Es obvio que el desgaste de estos dependerá del uso que le demos, las vías por las que circulemos e incluso nuestro estilo de conducción pero, aún así, los modelos eléctricos vuelven a ser los más convenientes.
Teniendo en cuenta nuevamente un rodaje de 120.000 kilómetros, los neumáticos de un coche eléctrico representarían un desembolso de apenas 600 euros. Los neumáticos para un modelo a gasolina representarían 869 euros, para un diésel 926 euros y para un híbrido de alta gama unos 1.124 euros, aunque en este caso el desgaste de los neumáticos varía mucho de un modelo a otro ya que depende del reparto de pesos que haya realizado el fabricante.
A la hora de elegir no todo es cuestión de números, también importa el uso que le darás
Aunque las cifras indican que los modelos eléctricos son más convenientes, lo cierto es que en la ecuación total debes incluir muchos otros factores.
Por ejemplo, si haces pocos kilómetros al año podrías elegir un coche a gasolina o un eléctrico ya que te resultará muy difícil amortizar el precio de un híbrido o un diésel. En cambio, si recorres muchos kilómetros podrías valorar un diésel pero si recorres esa distancia principalmente en la ciudad, un híbrido o un eléctrico son mejores opciones.
Considera que en ciudad los coches híbridos consumen un poco menos que los diésel ya que puedes aprovechar la frenada regenerativa y el motor eléctrico. Por otra parte, aunque los modelos eléctricos tienen un alto precio y aún existe la barrera de la autonomía, su costo por kilómetros es muy bajo y apenas requieren mantenimiento.
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