Tesla: ¿la verdadera revolución automotriz?

En la feria del automóvil de Frankfurt, una de las más importantes del año y que arranca el próximo jueves, habrá un stand presentando los mayores avances referentes a los carros que se manejan solos mientras interactúan los unos con los otros gracias al omnipresente internet.

Todo esto me parece muy llamativo y continúo navegando con el ánimo de ampliar las informaciones referentes a los carros realmente automáticos. Es entonces cuando aterrizo en el sitio web de una marca, para muchos desconocida: Tesla Motors.

Tesla cuenta con tres modelos en el mercado. El Tesla Roadster, el pionero de la marca, es el primer carro deportivo 100% eléctrico producido en serie. Fue lanzado en 2006, en California. A este lo siguieron los modelos S y X, que ya cuentan con la función del piloto automático.

En efecto, al activar dicho mecanismo, una cámara y un radar en la parte frontal, y un sistema de radares que funcionan por ultrasonido se ponen en marcha para conducir al carro. El sistema identifica las señales de tránsito, la demarcación en el asfalto y los otros vehículos y demás obstáculos en la vía.

Pero lo verdaderamente innovador de estos carros es que ninguno de ellos funciona a gasolina. Los Tesla utilizan motores de corriente alterna (AC), creados y patentados por el propio Nikola Tesla en 1888. De allí se explica el nombre de este nuevo fabricante automotriz.

Los modelos S y X de Tesla son autos de cinco puertas. Nada que ver con esos prototipos de carros eléctricos en los que a duras penas cabía una persona y que podían recorrer unos pocos kilómetros. Por el contrario, la autonomía de la batería de los Tesla es notable. El modelo más básico tiene una autonomía de 370 kilómetros, pero esta puede alcanzar los 427 kilómetros si el comprador se decide por la versión de mayor rendimiento.

La aceleración de los Tesla es también asombrosa. Dado que son carros extremadamente livianos, pueden ir de 0 a 100 en tan solo 3 segundos, poniéndolo a la altura de modelos como el Porsche Carrera GT o muchos de los Ferrari y los Lamborghini. En este link, usted podrá ver la calidad y reputación de los otros carros capaces de tal logro.

En Estados Unidos, Tesla está transformando radicalmente el mercado. La fábrica automotriz, otro producto revolucionario Made in Silicon Valley, ha instalado 500 estaciones de recarga rápida a lo largo y ancho de ese país. Estos puntos se alimentan de energía solar y lo mejor es que son gratis para los dueños de un Tesla. La empresa asegura que el uso de estas estaciones, que no toman más de 20 minutos para recargar el 50% de la batería, jamás será cobrado para sus carros.

Por si fuera poco, los Tesla han recibido las más altas calificaciones en lo que respecta a la seguridad en cabina. Además de contar con todos los airbags y cinturones, los Tesla tienen la ventaja de absorber mucha más energía en el episodio de un impacto frontal ya que el motor es mucho menos masivo que los de gasolina.

Los avances propuestos por Tesla no son sólo tecnológicos. El servicio de venta de esta nueva marca californiana no se parece en nada a todo lo que ya existe en el mercado. Tesla no tiene carros en stock, sino que por el contrario la empresa los fabrica a la demanda, según las especificaciones y deseos del comprador. En su página oficial, www.teslamotors.com , usted puede jugar a armar su Tesla. Entre las variables que usted puede modificar están el color, las especificaciones del motor, los rines, el techo y los acabados interiores. El precio varía según lo escogido, pero el comprador sabe exactamente qué está comprando. En Tesla no hay cabida para concesionarios ni intermediarios. El comprador paga por internet.

Elon Musk, CEO de Tesla Motors, promete nuevos y mejores avances para los próximos años. Se cree que dentro de poco los espejos retrovisores serán reemplazados por cámaras, esto en pro del mejoramiento de la aerodinámica de los nuevos modelos. Pero el proyecto más ambicioso que maneja la marca es la creación del Modelo III, un carro con especificaciones muy similares a las del Modelo S, pero a un precio muy competitivo. El sueño de Musk es que todos nos movilicemos en carros eléctricos. En síntesis, su plan es llevarnos de la gasolina al eléctrico sin morir en el intento.

Muchos de los fabricantes tradicionales de carros no son muy amigos del cambio, pero hay otras marcas que se han unido a la revolución liderada por Musk. La Mercedes, por ejemplo, es ya cliente de Tesla. La alemana le compra a la californiana baterías y motores eléctricos para sus carros híbridos, en un claro ejemplo de OEM de última generación.

Lo cierto es que Tesla está dando mucho de qué hablar y es la gran innovación automotriz de los últimos años. El Modelo III, que se supone estará listo a finales del próximo año, tal vez tenga un impacto similar al que tuvo el Modelo T de Ford a inicios del siglo XX. Pronto lo sabremos.