Friday, January 13, 2017

La “Alineación” no es solo la de Pekerman


Al terminar mi carrera y comenzar a trabajar, pude por fin comprar mi primer carrito, me llenó una sensación indescriptible de felicidad que me duró hasta aquel día en que mi papá me dijo: “Ya es hora de que le hagas la alineación”….. Mente en blanco!!! ¿De qué me estaba hablando? ¿Era el día de los inocentes?Yo ya le había cambiado el aceite, siempre lo tenía con buen nivel de gasolina y lo lavaba con frecuencia; era perfecto, no creía que mi primer y hermoso carro necesitara otro tipo de cuidados.
Además, ¿qué era eso de alineación? Por un momento pensé en el fútbol, pero como tenía claro que era imposible poner mi carro junto a otros diez y un balón fuera necesario para su buen funcionamiento, decidí que tenía que saber qué significaba y para qué servía. Y lo primero de lo que me enteré es que la alineación nunca viene sola, sino que la acompaña el balanceo. La cosa comenzaba a complicarse…
Algunas de mis amigas me comentaron que ellas ya habían pasado por ese proceso con sus carros y que no era doloroso; mis amigos añadieron que no se tardaba mucho tiempo en hacerla, pero ninguno supo explicarme en qué consistía y por qué era importante.
Así que decidí obtener la información que necesitaba de fuentes más eruditas:
“Una correcta alineación consiste en balancear todas las fuerzas por fricción, gravedad, fuerza centrífuga e impulso mientras el vehículo se desplaza.” [www.automecanico.com]

Bien. Tal vez esto era demasiado, ¿qué había sacado en claro? NADA. Nada de nada! Era la hora de tomar el toro por los cuernos y hablar con un verdadero experto: Un mecánico automotriz.
Así que un sábado por la mañana me fui con mi vehículo y mi mejor sonrisa a buscar las respuestas que necesitaba, y al final resulta que la alineación es importante porque permite que el desgaste de las bandas de rodamiento de las llantas sea parejo y que la dirección sea precisa, y el balanceo ayuda a tener mayor comodidad al conducir y a que la vida útil de las llantas sea más larga.
Los síntomas de que nuestro carro necesita una alineación y un balanceo son cuando notamos que, al soltar un poco el timón, el carro tiende a irse hacia la izquierda o la derecha, o si advertimos que el volante vibra o sentimos ruidos cuando vamos a mayor velocidad.
También cuando el timón está más duro de lo normal o si comprobamos que las llantas delanteras apuntan en una dirección mientras que las traseras lo hacen en otra.
La alineación y el balanceo se convierten en algo urgente si vemos que alguno de los neumáticos se desgasta más que otro o cuando le hemos realizado un mantenimiento al sistema de dirección o suspensión del vehículo, lo que en ciudades como Bogotá es frecuente, gracias al estado en que se encuentra la malla vial de la ciudad! O simplemente después de 10,000 km. de haber efectuado la última alineación, aunque el vehículo no parezca necesitarlo.

No comments:

Post a Comment