En camino hacia los carros autónomos

l pasado enero se celebró en Las Vegas el CES (Consumer Electronic Show), una de las ferias tecnológicas de referencia mundial, donde se presentan las novedades en todo tipo de sectores, entre ellos el automovilístico. El CES es el escaparate elegido para presentar lo último en carros autónomos, eléctricos o inteligentes que buscan hacer cada día más fácil la conducción, mejorar la seguridad y contaminar menos.

Una de las noticias que más se esperaban fue la alianza entre Ford y Amazon para que los autos de esta marca que utilizan Sync (tecnología de vehículos conectados a la web de la marca) se integren con el asistente virtual Alexa y el dispositivo Echo (sistema para el control de hogares inteligentes) de la compañía de comercio electrónico.

Esta asociación permitirá abrir y encender el carro a distancia, revisar la batería y el nivel de combustible o pedir cita con el mecánico; también se podrá desde el vehículo abrir la puerta del garaje, encender o apagar las luces de la casa y controlar otros dispositivos como el sistema de seguridad, todo esto mediante comandos de voz. Con esta tecnología quedarán vinculados los autos inteligentes con los hogares inteligentes.

Otra empresa que mostró una novedad importante para el mundo de motor fue Nvidia, la firma desarrolladora de circuitos integrados y procesadores gráficos presentó Drive PX2, una supercomputadora para vehículos autónomos que combina tecnologías de deep learning (algoritmos de aprendizaje profundo) con sensores y visión circundante.

Con el tamaño de una laptop, puede procesar rápidamente 12 cámaras de video, radar y sensores ultrasónicos que generan una visión periférica que ayudan al carro a tomar decisiones para la conducción autónoma, pues serán capaces de identificar peatones, imágenes, carteles y señales de tránsito. La primera firma en integrarlo en sus automóviles será Volvo.

Siguiendo con la tecnología para carros autónomos, la firma Quanergy presentó el S3, un sistema de radares con una panorámica de 360 grados, como casi todos los que existen en la actualidad, pero con la diferencia de que costará aproximadamente 300 dólares en lugar de los 70.000 de los modelos actuales.

El S3 es pequeño, no utiliza partes de teléfonos y los carros no tendrán que tener sensores por todas partes y el baúl lleno de aparatos para controlarlos, pues trabaja gracias a pulsos de luz que pueden ser desplazados y proyectados. La aparición de esta tecnología hará que los vehículos autónomos sean un poco más baratos.

Por su parte, General Motors presentó el Chevrolet Bolt, un carro eléctrico que soporta Android Auto y Apple CarPlay, que reemplazan el sistema de entretenimiento nativo con una interfaz similar a la de los teléfonos y que permitirá operar las aplicaciones del Smartphone activándolas mediante comandos de voz.

El Bolt tendrá un precio accesible y una autonomía de 320 kilómetros, además de que el espejo retrovisor del conductor estará conectado a una cámara trasera que permite ver sin los obstáculos que crean, por ejemplo, las cabezas de los pasajeros de las sillas traseras.

Volkswagen no se quedó atrás y mostró sus nuevos modelos eléctricos, como el Microbús que recargará el 80% de su batería en media hora y abrirá sus puertas con un comando de voz. También presentó el E-Golf Touch, al que definieron como un Smartphone sobre ruedas y el Budd-e que utiliza una tecnología que le permite conocer los hábitos de su dueño y comportarse de manera intuitiva con él.