Ahorrar gasolina: Aunque parezca increíble, es posible!

Ahora que estamos viendo el precio del dólar por las nubes, comencé a preocuparme seriamente por mi economía, ya que está visto que cuando el billete verde sube, el bolsillo de nosotros, los consumidores, sufre una barbaridad. Así que me propuse seriamente buscar formas de ahorro en todo lo que pudiera: desde la energía en mi casa hasta la mejor hora para ir a comprar al supermercado.

1. Al arrancar no es necesario calentar el motor como se hacía antiguamente (mi vecino, un señor mayor, lo sigue haciendo a pesar de que tiene un carro último modelo), ni tampoco es necesario pisar el acelerador aunque el carro lleve mucho tiempo sin moverse, porque cuando no está en movimiento, solo se desperdicia gasolina y se provoca un desgaste prematuro del motor.

2. Es mejor meter el cambio lo antes posible para no revolucionar demasiado el motor y así ahorrar combustible. La primera se debe usar solo al comenzar a moverse y después de unos pocos segundos pasar a segunda, y así ir pasando al resto, pues a una misma velocidad un carro puede consumir hasta un 10% menos al llevar un cambio más largo. Además, debe acelerarse al cambiar, para evitar que el motor baje demasiado de vueltas y empiece a funcionar en un punto de bajo rendimiento energético. Si, escrito parece complicado, pero si se lee con cuidado, se ve que no es tan difícil.

3. Cuando uno es de esos que se cree un campeón mundial de fórmula 1 frustrado y se desahoga por las calles de la ciudad, con acelerones bruscos y frenadas secas, no solo se está consumiendo más gasolina de la necesaria sino que se perjudica la transmisión, la suspensión y el sistema de frenos.
Además la velocidad de circulación debe ser moderada, ya que aumentarla un 20% puede suponer un incremento del combustible asociado del 50%. Entre 60 y 80 km/h la mayor parte de los carros ofrecen un óptimo rendimiento.

4. A la hora de frenar, intentar primero levantar el pie del acelerador y dejar rodar el motor con la marcha engranada, pisando después suavemente el pedal de freno. Entre más se demore en reducir la velocidad, menos gasolina consumirá.

5. Repostar por la mañana, cuando las temperaturas han permanecido más bajas durante la noche, porque esto hace que la gasolina sea más densa, así se estará comprando más combustible sólido y menos vapores por el mismo dinero.

6. Otra cosa es que no es conveniente repostar si están llenando los tanques de la gasolinera ni inmediatamente después, porque cuando los están surtiendo se remueve el combustible restante en los tanques y los sedimentos del fondo y se corre el riesgo de llenar nuestro carro con combustible sucio.

Aunque encontré muchos más consejos, estos son algunos de los principales y como todo lo que significa ahorro, lo importante es ir acumulando pequeñas cantidades que al final irán sumando una gran cantidad.